sábado, 11 de noviembre de 2017

Ahora que no llueve en La Raya...

(Foto: Archivo Histórico rayero)
Ahora que estamos viviendo una época de sequía y con los embalses bajo mínimos, recordamos la década de los 80, pródiga en lluvias y crecidas del Segura que llegaron incluso a anegar algunas calles del pueblo y buena parte del tramo del camino de la Puebla por la zona de las escuelas. La imagen, tomada en 1982, nos muestra el grupo de viviendas junto al taller mecánico de Pepe Hernández, el pajarilla, prácticamente a punto de ser inundadas por la riada de ese año, aunque en esta ocasión solo fue un "palmo" de agua. Cinco años después el río volvería a inundar la misma zona y el nivel alcalzaría casi el metro de altura.

En toda esa década hubo varias riadas bastante serias y una de ellas estuvo a punto de romper la mota del río, lo que hubiera supuesto un serio peligro para nuestro pueblo. Afortunadamente entre La Raya y el Rincón de Seca se produjo un aliviadero en la mota que evitó males mayores, aunque en esta ocasión los rinconeros vieron el agua correr por la Plaza de su Iglesia y calles aledañas. Los huertanos -los pocos que ya quedan dedicados a la noble tarea de cultivar la tierra- suspiran mientras observan el cielo y no por ver ninguna riada, sino porque se produzca una época de lluvias que rellene los embalses y  pueda asegurar los riegos.

(Redacción)