Todo parece estar motivado por una confusión con el número de DNI de la
hija del Rey, aunque nadie se hace responsable de la probable confusión
Dicen que equivocarse es de
humanos y rectificar de sabios, pero hay que llevar mucho cuidado con los
errores, puesto que éstos pueden torcer el estricto sentido de la Justicia. En
el caso de la supuesta venta de fincas por parte de la Infanta Cristina, las
incógnitas siguen. y Hacienda admite su "error" al tiempo que
reconoce que el desliz pudo provocarse por una confusión en el número de DNI de
la hija del Rey, pero no aclara quién cometió ese supuesto despiste y sigue
culpando a "terceros". Los registradores tampoco quieren admitir
culpa alguna, porque, insisten, en sus archivos figura que esos terrenos e
inmuebles nunca estuvieron a nombre de la duquesa de Palma y que es "más
que improbable" que se comunicaran datos equivocados si en las notas registrales
están correctos.
Después de cuatro días de
silencio, la Agencia Tributaria emitió un comunicado en el que asegura que
"en el presente caso, el error en la imputación de transmisiones de
inmuebles a Doña Cristina de Borbón y Grecia, es consecuencia de que la información
recibida por la Agencia figura atribuida a un DNI que coincide con el
suyo". Admite que sus técnicos no "comprobaron ni verificaron los
datos que remitieron al juez porque no podían hacerlo al tratarse de una
solicitud de información". Además –sigue explicando la nota- la
información corresponde a ejercicios prescritos respecto de los cuales no
existe posibilidad legal de hacer ningún tipo de comprobación en vía
administrativa." Siempre según Hacienda, la agencia "remitió al Juez
Castro los documentos que figuran en sus bases de datos, que son proporcionados
por terceros, y se enviaron en respuesta a la petición recibida el 31 de
mayo". La Agencia Tributaria intenta excusarse del error porque tramita
"un volumen de información ingente que, en ocasiones, afecta a miles de
datos, a varios años" y que es solicitada por los jueces para "ser
remitida en plazos muy breves". Para dar idea del volumen de información
que maneja la Agencia Tributaria -apunta el comunicado- basta el dato de que
"anualmente se reciben y procesan más de mil millones de datos que hay que
imputar a los contribuyentes".
"La Agencia Tributaria tiene
el máximo interés en que errores como este no vuelvan a producirse por lo que,
a estos efectos, va a iniciar un proceso de revisión de algunas fuentes de
información", ha anunciado el organismo. No obstante Hacienda sigue sin
desvelar quien cometió la alteración o error que terminó por adjudicar esas
fincas a la infanta. Habla siempre de "terceros" y esos
"terceros" no son otros que los registrados. El Colegio de
Registradores de la Propiedad, tras consultar a los cuatro registros
concernidos (Alicante, Almagro, Arenys de Mar y Pilar de la Horadada) ha
resuelto que las notas registrales confirman que las fincas jamás han estado a
nombre de la infanta.
Esta información coincide con las
que ya tienen en su poder los responsables del 'caso Noos' que han comprobado
que, al menos, seis de los actuales propietarios de esos inmuebles y terrenos
guardan las escrituras que prueban que la hija de don Juan Carlos no fue la
vendedora de esos solares y pisos de Alicante, Ciudad Real y Barcelona.
Según responsables de la
investigación, las escrituras ya revisadas pertenecen a los términos
municipales de Valenzuela de Calatrava, Calella y Playa de San Juan. En esos
documentos, tanto como "vendedores, compradores o transmitentes"
aparecen personas que nada tienen que ver con la familia real. Es más, ninguno
de sus NIF guarda aparente relación con el de Cristina de Borbón que pudiera
dar lugar a algún tipo de confusión. Aunque lo curioso -explican los
investigadores- es que todos los demás datos de las fincas sí que coinciden:
fechas de las operaciones, tipo y ubicación de finca...
La Agencia Tributaria informó la
pasada semana a Castro de que la duquesa de Palma vendió esas treces
propiedades por las que se habría embolsado 1.435.603 euros. Sin embargo, los
portavoces de la infanta han asegurado por activa y por pasiva que la
información facilitada por Hacienda es absolutamente errónea y que nunca la hija
del rey ha tenido la más mínima relación de propiedad o de cualquier otro tipo
con esos pisos, tierras y modestas fincas que se reparten en pueblos y casi
desconocidas pedanías de Barcelona, Alicante y Ciudad Real.
Hoy mismo, el abogado de Cristina
de Borbón, Miquel Roca, insistió en que esas fincas jamás fueron de su cliente,
pero descartó emprender acciones legales contra la Agencia Tributaria.
"Los errores se corrigen, y nada más", ha apuntado. La Agencia
Tributaria adjudica a la infanta ventas en las localidades alicantinas de Playa
de San Juan (2) y Pilar de la Horadada (5), en el pueblo ciudarealeño de
Valenzuela de Calatrava (5) y en el municipio barcelonés de Calella (1). Esta
última operación, afirma la Agencia Tributaria, habría sido la de mayor volumen
de esos dos años, al vender la duquesa una casa de 315 metros cuadrados por
450.000 euros.
(La Verdad y Agencias)