La lacra de la corrupción sigue
brotando como la mala hierba no solo en España, sino también en Murcia, como no
podía ser menos, frente a los efectos de una brutal crisis que está llevando al
extremo de la tolerancia a amplios sectores de la sociedad. Ahora la Guardia Civil
ha imputado al alcalde de Caravaca de la Cruz (Murcia), Domingo Aranda, por un
supuesto delito de tráfico de influencias, según han informado a la agencia Efe
fuentes de la investigación.
Aranda ha sido imputado después
de que agentes del Grupo de Delitos Urbanísticos de la Unidad Central Operativa
(UCO) de la Guardia Civil registraran esta mañana el Ayuntamiento de esa
localidad en una operación relacionadas con irregularidades urbanísticas. La
Guardia Civil está llevando a cabo siete registros relacionados con
irregularidades en la recalificación de terrenos en Murcia, entre ellos, además
del ayuntamiento de Caravaca, en la Consejería de Obras Públicas y Ordenación
del Territorio y en la sede de la Confederación Hidrográfica del Segura, ambas
en la capital.
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