domingo, 26 de agosto de 2012

UNOS 25.000 ESCOLARES PUEDEN QUEDAR SIN AYUDAS PARA LOS LIBROS DE TEXTO


LAS SUBVENCIONES CAEN UN 40% POR LA MENOR APORTACIÓN DEL ESTADO Y LA COMUNIDAD AUTÓNOMA

Muchas  familias de la Región pasarán estas primeras semanas de septiembre serios apuros para llenar las mochilas escolares de sus hijos con los libros de texto que son obligatorios. Las ayudas para libros, que ni siquiera están aprobadas aún, sufrirán un drástico recorte que dejará sin ayuda de ningún tipo de ayuda a miles de estudiantes los cuales tendrán que hacer frente la compra de los libros, un gasto que suele oscilar entre los 150 y los 400 euros, dependiendo de los cursos y el modelo de enseñanza. El presupuesto que las Administraciones central y autonómica dedican a las becas se reducirá este año más de un 40%. Según fuentes de la Consejería de Educación, el mayor recorte lo realiza el Ministerio, que aportará algo más de un millón de euros, y la Administración regional redondeará la cifra hasta los cinco millones. El pasado curso el Estado aportó 4,2 millones y la Comunidad la misma cantidad, sumando en total 8,4 millones de euros, que ayudaron a más de 65.000 escolares de Primaria y Secundaria a comprar los libros de texto ya que son las etapas obligatorias.

La propia Consejería de Educación reconoce que los cinco millones de este año darán para 40.000 ayudas nada más, pero insiste en el importante esfuerzo que está realizando la Comunidad para alcanzar esa cuantía, teniendo en cuenta el recorte del Ministerio, y que en otras comunidades ni siquiera se repartirán becas. Pero además las ayudas llegarán recortadas y con retraso. El decreto que las regula ni siquiera ha sido aprobado (la Comunidad quiere hacerlo en el Consejo de Gobierno del próximo 7 de septiembre), y así difícilmente estarán a disposición de los padres antes del inicio de curso, previsto para el lunes 10 de septiembre, en Primaria, y el 17 de septiembre, en Secundaria. Los padres beneficiarios de ayudas tendrán que recurrir a determinadas soluciones de emergencia, como fotocopiar los libros de otros compañeros de curso para que sus hijos puedan seguir las clases, adelantar el dinero o dejar la deuda en las librerías, una circunstancia que no es nueva pues el curso pasado, y a pesar de que la convocatoria de ayudas para libros se publicó en el mes de junio, el pago se retrasó hasta enero en el mejor de los casos, ya que los padres que no recibieron beca en el primer reparto pero sí la lograron en el segundo tardaron varios meses más en ingresarla.
El peor escenario lo pintan las asociaciones de padres, los sindicatos y la oposición, quienes temen que la escasez de recursos que padecen miles de familias y la falta de ayudas provoquen que sean muchos los escolares que comiencen el primer día de clase sin su material por lo que posiblemente sean muchos los niños que vayan a clase sin su material. Por otra parte las ayudas -de 110 euros para los alumnos de Primaria y de 150 para los de Secundaria- no cubren el importe total de los libros, cuyo precio varía dependiendo del nivel educativo (en Secundaria los lotes son más caros y pueden llegar a los 300 euros) y también del modelo educativo; los libros bilingües suelen tener un coste más elevado.

(RESUMENDE AGENCIAS)